Por: Maria Camila Conteras, Línea Conflicto, Paz y Postconflicto
Soy La Cachirri La memoria de un cuerpo rebelde De un cuerpo desafiante Que a pesar de todas las amenazas Nunca retrocedió.
Chaparral es un municipio que vio nacer las guerrillas liberales de los años cincuenta y presenció también la conformación de las FARC en el departamento del Tolima. En la zona urbana de este municipio lacerado por la guerra nació en 1997 Danna Méndez, líder trans e integrante de la Asociación Chaparral LGBTI Diversa.
Danna ingresó a la Asociación en 2012, con la esperanza de encontrar un espacio en el que fuera posible su existencia como mujer trans. Como parte de la Asociación, Danna afirmó “me he destacado como lo que soy, la mujertrans sin pena y con orgullo”[1]. Hacer parte de este espacio le permitió reconocerse como un sujeto de derechos. Así mismo, junto con todas sus compañeras, pudo crear un sentido de pertenencia a una comunidad alterna a la sociedad heteronormativa que habita el municipio de Chaparral y al contexto de guerra que lo atraviesa desde los tiempos del accionar del Frente 21 de las FARC.
No obstante, el trabajo para Danna, sus compañeras y compañeros no fue ni ha sido fácil. La comunidad LGBTI ha debido hacer frente no solo a la violencia perpetrada por grupos armados que les impusieron un proyecto moral heterosexual, sino también a la violencia estructural contra esta población en un municipio y un país que, en el mejor delos casos, ve las personas LGBTI como una amenaza. En varias ocasiones, la comunidad promovió o justificó los hechos violentos que los grupos armados al margen de la ley dirigieron hacia esta población en el marco de la guerra. En el caso de Danna, una de sus compañeras oyó a un hombre decir: “Deberían matarlos a todos”, y eso: “Deberían matar a todos los maricas de Chaparral, todos esos maricas llenos de sida que no sé qué”[2].
Sobreponerse a estas vicisitudes posibilitó la creación de espacios transgresores que han causado incomodidad entre los chaparralunos y los grupos armados ubicados en la zona. La Asociación Chaparral LGBTI Diversa ha tenido que enfrentar amenazas y acciones violentas orientadas a entorpecer su labor. Estos hechos gestan una relación de poder que se signa sobre los cuerpos, el territorio y la memoria de las personas LGBTI en el municipio.
Danna Méndez, como líder y mujer trans fue una víctima de este contexto de violencia contra la población LGBTI. La noche del 11 de febrero Danna fue vista por última vez en el parque principal de Chaparral junto a algunas compañeras de la Asociación. Cinco días después, su cuerpo fue encontrado en un sector conocido como Llano del Loco con signos de tortura y violencia sexual. Cinco meses después, fue capturado el militar Dorancé Rojas García por su responsabilidad material en el crimen de Danna Méndez.
El homicidio de Danna hace parte del asedio a la Asociación Chaparral LGBTI Diversa por su labor en defensa delos derechos de esta población. La arremetida violenta en su contra se evidenció también en mayo de este año, cuando un mural que habían construido en conmemoración de las víctimas LGBTI en Chaparral fue borrado. Sin embargo, a pesar de las acciones violentas en su contra, esta organización sigue trabajando para crear espacios de interlocución con la comunidad y el gobierno. Su trabajo, reiteran, es en honor a Danna y las otras nueve personas LGBTI que han muerto de manera violenta en Chaparral en los últimos 15 años.
[1] CNMH. Corto documental voces incómodas. http://www.centrodememoriahistorica.gov.co/noticias/noticias-cmh/voces-incomodas-un-homenaje-a-las-victimas-lgbt-en-chaparral
[2] CNMH. Un carnaval de resistencia: memorias del reinado trans del río Tuluní. Junio de 2018. Chaparral, Tolima. Pág 30.