Por: Laura Cano. Periodista Pares.
Ya comienzan a conocerse algunos análisis de lo que podría pasar en el país en materia económica, luego de un año con importantes impactos económicos y sociales dadas las medidas restrictivas a causa de la propagación de virus Covid-19. Por ejemplo, recientemente el DANE informó que durante el tercer trimestre de 2020 el Producto Interno Bruto – PIB- decreció un 9,0% respecto al mismo periodo de 2019.
En este sentido se indicó que la actividad económica que más contribuyó al decrecimiento del tercer trimestre de 2020 fue el comercio al por mayor y al por menor; reparación de vehículos automotores y motocicletas; transporte y almacenamiento; y alojamiento y servicios de comida, que en su totalidad decrecieron un 20,1%. Asimismo, hubo una tendencia a la baja de las labores de construcción, las cuales decrecieron un e 26,2%.
Adicionalmente, esta tendencia general también se explica por los siguientes por los siguientes comportamientos, pues se reportó un decrecimiento del 7.0% del gasto en consumo final -valor de los bienes y servicios utilizados para la satisfacción directa de las necesidades humanas, individuales o colectivas de las administraciones públicas e instituciones privadas sin fines de lucro que sirven a los hogares- , del 18,3% de la formación bruta de capital, del 24,1% en las exportaciones y del 21,1% en las importaciones.
Una de las razones de estos decrecimientos fueron las cuarentenas y aislamientos, especialmente los impuestos desde finales de diciembre, en donde en algunas ciudades hubo confinamientos sectorizados, toques de queda y restricciones a los compradores. Imagen: Pares.
Por otra parte, vale la pena mencionar que durante el primer trimestre de 2020 hubo un crecimiento del PIB del 1,1%, mientras que el segundo semestre del mismo año cayó un 15,7% en comparación con el mismo lapso de 2019.
Lo que se prevé para el 2021
En este sentido hay que señalar que se han comunicado dos aproximaciones en relación con esto. Por una parte, el Banco de la República redujo sus proyecciones de crecimiento económico, indicando que la estimación de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para el 2021 será, probablemente, del 4.5%.
“La estimación de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para este 2021 estaba en un rango de entre 2% y 6%, con un 4,5% como cifra más probable, desde una proyección previa de entre 3% y 7%», se afirmó por medio del más reciente informe del organismo. Adicionalmente, se comunicó que el pronóstico de crecimiento para el 2022 será del 3,5 %, lo que significa que los niveles del PIB de 2019 se alcanzarían solo a finales del próximo año.
Por su parte, sobre el comportamiento de la inflación para este año, se inicia aclarando que para el 2020 fue de 1,61 % y la inflación sin alimentos ni regulados fue de 1,11 %, estos porcentajes, como se afirmó, descendieron más de lo esperado, por lo que los pronósticos para finales de 2021 se redujeron y se situaron en 2,3 % y 2,1 %, respectivamente, y 2,7% en 2022.
Sobre el resto de las variables, el equipo técnico del Banco de la República pronostica que los crecimientos proyectados de la demanda externa para 2021, los cuales estrían 4,4 % por encima de lo que fue en el 2020. Sobre los precios del petróleo, en 2021 el valor se situaría en US$52,8 (entre US$38 y US$64) por barril, y en US$56,4 (entre US$41 y US$70) por barril en 2022.
Por otro lado, el equipo de investigaciones económicas de Bancolombia publicó el más reciente índice Nowcast, en el cual proyecta que la economía colombiana bajó 5,8 % en enero de 2021, esto en comparación con lo reportado para el mismo mes, pero de 2020, esta caída sería la más pronunciada desde septiembre del 2020.
Asimismo, el NowCast proyecta que el PIB de Colombia caiga entre 3,5 % y 7 % durante el primer trimestre del presente año. Pero también se prevé que, de ahí en adelante, los indicadores podrían comenzar a ascender positivamente.
No obstante, esta última afirmación estaría atravesada por las restricciones que se implementen en los próximos meses, pues como se indicó en ambos informes una de las razones de estos decrecimientos fueron las cuarentenas y aislamientos, especialmente los impuestos desde finales de diciembre, en donde en algunas ciudades hubo confinamientos sectorizados, toques de queda y restricciones a los compradores.