
El presidente Gustavo Petro firmó el decreto con el que convoca a la Consulta Popular. Lo hizo varias horas antes de salir a dar un discurso frente a la gente movilizada en Cali —que tuvo que esperarlo varias horas para escucharlo hablar—, con Simón Bolívar y una pequeña bandera de la “guerra a muerte” de fondo. Lo hizo, de acuerdo con Armando Benedetti, ministro del Interior, porque el plazo de la convocatoria se vencía el 12 de junio a las 12:00 am.
Finalmente, el gobierno dio el paso y decretó la Consulta Popular, en un momento de alta crispación política, en la que las tensiones entre las tres ramas del poder público están en un punto bastante álgido. Aun cuando continua el debate jurídico sobre la legalidad de la votación de la plenaria del Senado que terminó hundiendo la primera convocatoria, el gobierno decidió arriesgarse a firmarlo, bajo el argumento de que hoy se vencía el plazo por el cual el presidente podía convocar este mecanismo de participación ciudadana.
Este es nuestro fundamento legal sobre la consulta. pic.twitter.com/zjk8zZVro4
— Gustavo Petro (@petrogustavo) June 11, 2025
Esto es importante porque a partir de esa lectura jurídica es que empieza la batalla legal por lograr que la Consulta Popular sea votada o no el 7 de agosto, fecha en la que el presidente la convocó en el decreto firmado este 11 de junio, y que se dará en varios escenarios:

Mientras la plenaria del Senado de la República comenzaba la discusión de la revivida reforma laboral, luego de haber suspendido la sesión del pasado lunes 9 de junio tras el atentado al senador y precandidato presidencial por el Centro Democrático, Miguel Uribe Turbay, el presidente Gustavo Petro firmaba el decreto de convocatoria a la Consulta Popular, cerca de las 4:15 pm.

Tras el atentado del 7 de junio, el presidente convocó, a través de su ministro del Interior, Armando Benedetti, a la Comisión de Garantías Electorales, con el objetivo de establecer lineamientos de seguridad y protección para los precandidatos presidenciales en el inicio de campaña hacia 2026. La invitación se realizó luego de un consejo de seguridad y de varios llamados del gobierno a la concordia, además de que insistió en que el encuentro era de carácter institucional y no político, enfocado exclusivamente en discutir garantías electorales y condiciones de seguridad para los aspirantes. A esta comisión solo asistió el Partido Verde, el Pacto Histórico, la Defensoría del Pueblo, el Consejo Nacional Electoral y la Procuraduría General.