La delegación del ELN ha rechazado, a través de un comunicado en redes sociales, la acusación de un plan para atentar contra el fiscal general, Francisco Barbosa. El grupo guerrillero califica la denuncia como falsa y la considera un intento de sabotear el proceso de diálogo en curso entre el Gobierno y el ELN.

La Fiscalía había revelado información sobre un supuesto plan de atentado utilizando francotiradores, basándose en tres fuentes confiables, incluyendo inteligencia militar y el Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía. Se informó que cinco altos mandos del ELN se habrían reunido en Venezuela para llevar a cabo una capacitación estratégica con el propósito de ejecutar atentados.

La gravedad de la situación lleva a las autoridades a no tomar a la ligera esta amenaza, a pesar de la falta de pruebas concretas hasta el momento. Se ha mencionado que personas cercanas al líder del frente urbano del ELN, alias 'el Rolo', están vinculadas a transacciones financieras sospechosas que recuerdan a aquellas previas al atentado contra la Escuela de Policía General Santander en 2019. Este ataque, en el que fallecieron 22 cadetes de policía, tuvo implicaciones significativas en las negociaciones de paz entre el ELN y el Gobierno. Tras años de estancamiento, las conversaciones fueron retomadas en 2022 y llevaron a acuerdos parciales y un cese al fuego bilateral que comenzó el 3 de agosto de este año.