El Gobierno de Gustavo Petro, a través de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, negó que se haya discutido o negociado la propuesta de destinar fondos de cooperación internacional para la manutención del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la mesa de diálogos. El presidente Petro mencionó que el fondo multilateral depende de los acuerdos que se alcancen en las negociaciones con la guerrilla, pero hasta el momento no se ha abordado en la discusión. El fiscal general Francisco Barbosa criticó duramente la propuesta, calificándola como una "vacuna" para los colombianos y un estímulo a la criminalidad, argumentando que se deben aplicar estrictamente la ley y las sanciones penales.

En medio del cese bilateral anunciado entre el Gobierno y el ELN, se reveló que el Ejecutivo estaría considerando utilizar recursos de la cooperación internacional para subsidiar la manutención de la guerrilla. Según estimaciones de la misma guerrilla, se requerirían alrededor de 3.000 millones de pesos mensuales para mantener entre 4.000 y 5.000 de sus miembros. El Gobierno estaría explorando fórmulas para proporcionar este subsidio a cambio de que el ELN no continúe delinquiendo. Sin embargo, el fiscal Barbosa argumentó que entregar recursos a un grupo delincuencial como estímulo para que deje de delinquir es inaceptable y va en contra de los valores constitucionales.

Aunque los subversivos del ELN admitieron que continuarán realizando "retenciones" para subsistir y financiarse, las discusiones sobre las operaciones financieras del grupo no han concluido en la mesa de negociación. La propuesta de utilizar fondos de cooperación internacional para la manutención de la guerrilla no ha sido abordada en los acuerdos actuales.