Por: Redacción Pares
Hay algo que le envidia Gustavo Petro a Misael Pastrana Borrero y es la influencia que tenía en medios de comunicación. A pesar de que su elección terminó siendo la más polémica de la historia -los rumores de fraude electoral terminarían confirmándose unos años después- y de que impuso impuestos como el UPAC que terminarían golpeando muy duro a la clase media, tuvo el respaldo de los grandes medios quienes jamás lo sometieron al escarnio público.
Pero, además de esto, Misael Pastrana fue el cerebro del Pacto del Chicoral, un acuerdo firmado entre terratenientes, congresistas y latifundistas en 1972 para frenar la reforma agraria propuesta en gobiernos anteriores. LLeras Camargo, después del cataclismo que significó el Bogotazo y su posterior estado de Violencia, promovió el INCORA, un organismo que serviría para lanzar la Reforma Agraria. Se había identificado que uno de los orígenes del estallido de la Violencia era la mala distribución de la tierra. Se necesitaba corregir ese error. La Asociación Nacional de Usuarios Campesinos, ANUC, dio el visto bueno a esta iniciativa. Pero una década después Misael Pastrana, un lacayo de las élites, mandó a revertir lo que se había ganado. Se crea el Pacto de Chicoral que consiste en tres puntos:
1. Responder la movilización campesina promovida por la ANUC
2. Seguir a pie juntillas el plan económico promovido por el economista canadiense Lauchlin Currie que consistía en aumentar la exportación de productos agrícolas.
3. Los empresarios, presos de su mezquindad, creían que las reformas de Lleras Camargo buscaban expropiarlos, algo que definitivamente no sucedió
El movimiento campesino inmediatamente reaccionó: "Lo de Chicoral fue un pacto de de la oligarquía liberal-conservadora en el que los terratenientes reaccionaron con el fin de conservar sus tierras", dijo Alirio Orrego, dirigente de la Unión Patriótica.
Esta movida de Pastrana padre significó el aumento de los monocultivos y terminó convertido, acaso inconscientemente en un impulso al narcotráfico. Cincuenta y dos años después el gobierno de Gustavo Petro llega a Chicoral Tolima a revertir la historia. Entre el 13 y el 14 de diciembre se realizará un pacto por la Tierra y la Vida que servirá para impulsar la Reforma Agraria. Esta deuda con la historia intentará ser saldada. Uno de los objetivos de este gobierno es intentar cerrar el ciclo que ha impedido que la Reforma Agraria se cristalice en Colombia. Para eso se han llegado a pactos con terratenientes quienes están listos para dar un paso importante. Sin embargo no se puede olvidar el papel nefasto que interpretó Misael Pastrana Borrero y su presidencia cuando intentó frenar algo que es tan necesario para aspirar a la paz total en este país y es la redistribución de la tierra.
Siempre del lado de los latifundistas y poderosos, la dinastía Pastrana ha sido una de las causantes de que la brecha entre ricos y pobres se haga cada vez más extensa. Este gobierno intentará concretar, de una vez por todas, la ansiada Reforma Agraria.
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