Por: Redacción Pares
Esta semana la noticia más importante fue el juicio que se le sigue a Alvaro Uribe. Se escucharon los testimonios de Iván Cepeda y de Deyanira Gómez, quien dio su versión reemplazando a su ex comañero, Juan Guillermo Monsalve, quien no pudo asistir por problemas de salud y por confusos hechos que se presentaron en su celda en donde miembros del INPEC habrían irrumpido dejándolo con varios golpes. Esta versión fue negada por la ministra de justicia. Mientras tanto la apuesta de Jaime Granados, cabeza de la defensa de Uribe, sigue intentando dilatar lo más que se pueda el juicio. La apuesta está clara, enlodar hasta el 7 de octubre del 2025, fecha en la que este caso se vence. Si se llega a la prescripción el proceso se cae y Uribe estará a salvo.
La semana pasada Jaime Granados presentó una tutela en donde se pedía un cambio de jueza, ya que Sandra Liliana Heredia, quien está al frente del caso, debería dar un paso al costado ya que la defensa del expresidente considera que la funcionaria no estudió a fondo el acto procesal. Hace una semana el Tribunal Supremo de Bogotá negó esa tutela y el juicio proseguía. Pero Granados no es de los abogados que baje los brazos tan fácilmente. No aceptaron la decisión de rechazar la tutela y acaban de impugnarla a través de un documento: Consideramos que el fallo impugnado incurre en un error conceptual al decidir que el amparo era improcedente, cuando, en realidad, su pronunciamiento fue mucho más allá y resolvió de fondo la tutela, negándola”
Granados y su equipo de defensa no están de acuerdo con que la jueza Heredia continúe al frente del caso. Esta semana mostró su independencia después de que llamara la atención de Granados luego de que el abogado arrinconara a preguntas que rayaban en la intimidación contra el senador Iván Cepeda. Ahora el Tribunal Supremo de Bogotá tendrá que estudiar el recurso presentado por Granados. Se tendrá que atendar a lo que estos abogados señalan. Lo único cierto es que esta maniobra podría interrumpir el juicio y demorarlo aún más. Existe preocupación porque podría suceder con este juicio lo que ocurre la mayoría de veces en que personajes poderosos deben comparecer ante tribunales de justicia: se dilata y se dilata hasta la prescripción.
Comments