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Frontera colombo-venezolana: entre la muerte y el desplazamiento

Por: Sergio Saavedra. Periodista Pares.


De acuerdo con el más reciente informe de la Fundación Paz y Reconciliación ‘Seguridad y Migración en la Frontera’, en los 24 municipios de las subregiones priorizadas por el informe —(I)Norte de Santander-Táchira y Sur de Zulia, (II) La Guajira-Zulia y (III) Arauca-Apure—; 472 personas fueron asesinadas durante 2020, 63 de ellas de nacionalidad venezolana. Además, se registraron 24 asesinatos en cerca de seis (6) masacres perpetradas en estas tres subregiones. Asimismo, fueron desplazadas, de manera forzada, 1.365 personas.


Este es apenas la punta del iceberg sobre la delicada situación en materia de seguridad y de violación de Derechos Humanos que vive la zona fronteriza colombo-venezolana, que se encuentra a expensas de los grupos al margen de la ley que continúa haciendo de las suyas frente a los desgobiernos.


Tasa homicida


En este sentido, de las tres subregiones priorizadas, la violencia homicida se ha concentrado para el caso de Norte de Santander en seis (6) municipios: Puerto Santander tiene una tasa de homicidio 22,6 por cada 10 mil habitantes, Tibú (15,58), Convención (11,85), El Carmen (3,56), Teorama (2,26), Villa del Rosario (2,07) y la capital; Cúcuta en, dónde en lo que va corrido del año, han sido asesinadas 200 personas. Es decir, que la ciudad cucuteña presentó una tasa homicida del 2,33 por cada 10 mil habitantes.


Dos (2) municipios del departamento de Arauca: Saravana que presentó una tasa de homicidio de (2,38) por cada 10 mil habitantes y Arauquita con el (1,96). El municipio de Maicao (La Guajira), por su parte, tuvo una tasa homicida de (2,81) por cada 10 mil habitantes.


Desplazamiento forzado


Los cinco (5) municipios que más registraron casos de desplazamiento forzado en los departamentos de Santander, Arauca y La Guajira son Tibú con 359 casos, Cúcuta (170), Saravena (164), Convención (158) y Teorama (132). De acuerdo con la investigadora Nacional, Paola Perdomo, el fenómeno de violencia en el municipio de Tibú, con respecto a los elevados casos de desplazamiento forzado durante el año tiene que ver con las masacres perpetradas por ‘Los Rastrojos’.


Presencia de Estructuras Armadas Ilegales


De acuerdo con el informe Pares, existe una fuerte preocupación por cuenta de la presencia de las Estructuras Armadas Ilegales (EAI), sus repertorios de violencia y el fortalecimiento que han venido presentando, especialmente, en la frontera de Norte de Santander y Táchira. En Cúcuta, Puerto Santander y Villa del Rosario, según el informe, actualmente hacen presencia la guerrilla del ELN y ‘Los Rastrojos’. En Herrán, Ragonvalia y Toledo —municipios fronterizos del sur— hace presencia el ELN.


Ahora bien, según señala el informe Pares, del lado venezolano de la frontera hacen presencia ‘Los Rastrojos’ y el ELN, principalmente, en García de Hevia, Ureña y Bolívar. Ahora bien, algunas de las bandas delincuenciales que más ejercen control del lado venezolano de la frontera, son Tren de Aragua y La Línea, especialmente, en Ureña y Estado de Táchira.


Una pregunta sobre el futuro en seguridad


El informe plantea una pregunta, ¿podría considerarse la existencia de algún tipo de estrategia de fortalecimiento y expansión conjunta entre estos grupos armados, ilegales y legales, en la frontera entre Colombia y Venezuela?


Frente a ello, el informe esboza los siguientes elementos en materia de seguridad que aportan a las discusiones que suscita esta pregunta:


• Debilitamiento de grupos delincuenciales organizados, como Los Rastrojos y otros de carácter transnacional, y grupos armados organizados, como el EPL o Pelusos, asociados binacionalmente a estructuras paramilitares.

• Fortalecimiento del ELN en zona fronteriza venezolana.

• Presuntas acciones conjuntas entre el ELN y Fuerzas Militares venezolanas en contra de estos últimos y GAPF de la Segunda Marquetalia.

• Ninguna acción de confrontación entre el ELN y los GAPF Frente33 y la Estructura Décima Martín Villa, en Arauca y Apure.

• Mayor dinámica del narcotráfico relacionada con estos últimos.

• Intenso control social violento por parte del ELN y los GAPF

• Aumento de reclutamiento forzado, hurto de armamento y vehículos.


 

«La presente publicación ha sido elaborada con el apoyo financiero del Fondo Europeo para la Paz. Su contenido es responsabilidad exclusiva de Tejidos y no necesariamente refleja los puntos de vista de la Unión Europea.»

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