Por: Sergio Saavedra. Redacción Pares
Cerca de 40 horas completa al aire en el dial 92.3 f.m. una señal proveniente de un punto en el norte del departamento de Antioquia, a 1550 metros sobre el nivel del mar, recostado sobre la cordillera occidental colombiana y bañado por el río Cauca. En lo alto de la región montañosa se eleva una antena para darle vida a la segunda emisora de pedagogía para la paz en Colombia, en el municipio de Ituango.
Tal como se estableció en el punto 6.5 del Acuerdo para la terminación del conflicto con las Farc-ep, se consolida un proyecto radial que pretende cobijar a las zonas más golpeadas por el conflicto armado en Colombia. Para este caso, Ituango es la segunda emisora de paz que se pone al aire y la primera del departamento antioqueño. Desde el 25 de junio están al aire las primeras voces en la radio de paz del municipio de Chaparral, en el departamento de Tolima.
Ahora que los pobladores del municipio de Ituango cuentan con esta nueva estación radial; desde las cabinas de sonido se estarán desarrollando temas en torno de a los avances que ha tenido el Acuerdo de Paz y el fortalecimiento de pedagogía de paz con un enfoque cultural para contribuir a la reconstrucción del tejido social tras las vicisitudes de la guerra.
La emisora de paz de Ituango será operada por Radio Nacional de Colombia, en el marco de los parámetros del Sistema de Medios Públicos (RTVC). En este sentido, la emisora ya cuenta con un equipo que fue contratado por la RTVC, con la particularidad de que los integrantes de dicho equipo deben ser originarios de la región. A su vez, con el espacio que brinda la emisora podrán escucharse voces que trabajan por la Verdad, Justicia, Reparación y que exigen la garantía de No Repetición.
Ahora bien, la programación se estableció específicamente en tres espacios; uno de carácter informativo, uno enfocado a los procesos de construcción y reconstrucción de tejido social y, finalmente, uno de análisis que contará con la participación de expertos y analistas para presentar las perspectivas de lo que viene sucediendo en torno a la implementación del Acuerdo de Paz.
Así las cosas, ya al aire, la emisora de paz de Chaparral y de Ituango se espera que, en lo que resta del año, entren en funcionamiento las estaciones radiales para San Jacinto (en el departamento de Bolívar), en Fonseca (en La Guajira) y en Convención (Norte de Santander). Para que de esta forma, se continúe caminando a las 20 emisoras de paz pactadas a partir del Acuerdo.
Una mirada radial en la región
Según las cifras de la Cartografía de la Información de la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), “en Antioquia, el 31% de la población vive en municipios en silencio, lugares donde no existen medios de comunicación que produzcan noticias locales. Solamente en 29 de los 114 municipios mapeados; sus habitantes tienen una oferta con suficiente información local”.
Con lo que respecta a la región del Noroccidente antioqueño el 36% de las comunidades que habitan los municipios están bajo la categoría de silencio. A su vez, la FLIP alerta sobre las denuncias que han hecho en la región con lo referente a la censura de los medios para tocar temas de “conflicto armado, orden público y temas ambientales, principalmente en los municipios de Ituango, Entrerrios, Santa Fe de Antioquia y Liborina”. Frente a este panorama, se resalta la importancia que tendrá el papel de la emisora de Ituango para los temas que la comunidad quiera tocar.
Para el caso del municipio de Ituango, teniendo en cuenta que su población es aproximadamente de 19.578 habitantes, solo cuenta con una emisora comunitaria con informativos para todo el municipio y, la otra emisora que está en poder de la Fuerza Pública. Resulta interesante el papel que entra a jugar la emisora de paz de Ituango, a su vez porque según la FLIP, Ituango se encuentra en una escala de insuficiencia en términos de producción local.
Tras los micrófonos: la guerra y la búsqueda de paz
La descentralización de los medios de comunicación a nivel nacional es de vital importancia para las comunidades que han sido históricamente olvidadas por el Estado y, que han sido golpeadas por la guerra. No solo por los procesos culturales y sociales que permite la presencia de una radio desde las comunidades, sino por la soberanía de la construcción de memoria y de paz que se pueda desprender de una emisora.
Asimismo, porque para el caso del departamento antioqueño existen heridas abiertas sobre hechos victimizantes que ocurrieron en el marco del conflicto armado y que continúan sucediendo en el territorio tras la firma del Acuerdo.
Un ejemplo de ello se constata en el registro del sistema de información SIPARES de la Fundación Paz & Reconciliación que muestra que entre 2016 —desde el 24 de noviembre de 2016 (día en que se firmó el Acuerdo de Paz)— hasta el 3 de julio de 2019; en el municipio de Ituango se han registrado el asesinato selectivo de 13 personas.
Dentro de las victimas se encuentran siete personas en proceso de reincorporación, cuatro líderes comunales de JAC, un líder indígena y un líder campesino. Además, ocho de los asesinatos se registraron tan solo en 2018.
De hecho, a nivel del departamento de Antioquia, Ituango es el municipio que registra mayor victimización en términos de asesinato selectivo. Incluso, casi doblando el numero de hechos victimizantes de Medellín y del municipio de Cáceres.
El siguiente mapa de calor del sistema de información SIPARES muestra el comportamiento de la violencia a nivel del departamento antioqueño; lo que ha generado mayores dificultades para las comunidades en la búsqueda de articular procesos culturales en clave de paz. Debido a que, entre otras cosas, la violencia está fracturando los liderazgos para la construcción de paz.
A su vez, tal como lo señaló el último informe trimestral de la ONU, el tema del desplazamiento masivo viene siendo un problema a nivel nacional. De hecho, en el informe citan la denuncia del Defensor del Pueblo que coincide con las investigaciones de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.
La información señalada en el informe trimestral señala que “entre el 1 de enero y el 7 de junio, se produjeron 35 desplazamientos en masa relacionados con la presencia de grupos armados ilegales, que afectaron a 8.223 personas en Nariño, Norte de Santander, Córdoba, Antioquia, el Chocó, Magdalena, el Valle del Cauca y el Cauca”.
De hecho, ya para el mes de marzo en el caso de Ituango, la Defensoría del Pueblo publicó una alerta temprana en el cual se denunció que en un lapso de tan solo 50 días se registró el desplazamiento forzado de 2.192 personas en Ituango (Antioquia), Cáceres, Valdivia, Tarazá y Caucasia (Bajo Cauca) y en San José de Uré (Córdoba).
Dichos desplazamientos han generado, entre otras cosas, alto riesgo para las comunidades del Pueblo Embera Katío y del Pueblo Zenú. Como también ha conllevado al confinamiento para comunidades campesinas e indígenas en Caucasia, Cáceres, Tarazá e Ituango.
Por otro lado, la Defensoría ha hecho hincapié en que los combates en estas zonas son producidos por “Grupos Armados Ilegales Ilegales posdesmovilización de las AUC (Autodefensas Gaitanistas de Colombia y el Frente Virgilio Peralta Arenas de las Autodefensas Campesinas conocidos también como ‘los caparrapos’) en Tarazá, Cáceres, Caucasia, Ituango y San José de Uré”.
Asimismo, según cifras del Registro Único de Victimas (RUV) el desplazamiento en el municipio de Ituango viene siendo un problema que se acrecienta y que imposibilita procesos de reconstrucción de tejido para la comunidad. Tal como se evidencia en la siguiente tabla, en 2018 crecieron de manera exponencial los casos de desplazamiento.
La radio permite decirle no al olvido
Para efectos de procesos de memoria en la radio, hay que tener en cuenta la fuerte victimización que sufrió el departamento de Antioquia pues, según el Observatorio de Memoria y Conflicto del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH), se registraron 19.794 víctimas de desaparición forzada, 7.197 víctimas de masacres, 62.401 víctimas de asesinatos selectivos y 2.968 casos registrados de víctimas de violencia sexual.
Ya en lo que tiene que ver con Ituango, según datos del CNMH, en el municipio se registraron 266 victimas registradas de desaparición forzada, 71 de masacres, 52 de violencia sexual y 469 víctimas de asesinato selectivo.
Los ríos y los silencios
Ahora bien, es importante señalar el proceso que adelantará la emisora con el trabajo de memoria de las comunidades aledañas al río Cauca. Esto, entre otras cosas, por proyectos como el de Hidroituango, el cual ha venido siendo rechazado por las comunidades desde su fase de planeación, pues en los 17 municipios que rodean el río en Antioquia se han perpetrado alrededor de 110 masacres y se registran 2.345 víctimas de desaparición forzada.
Las comunidades esperan encontrar verdad y su ejercicio de memoria podría tener cabida en la emisora de paz.
«La presente publicación ha sido elaborada con el apoyo financiero del Fondo Europeo para la Paz. Su contenido es responsabilidad exclusiva del Proyecto Tejidos y no necesariamente refleja los puntos de vista de la Unión Europea»
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