Por: Diego Alejandro Pedraza, investigador de la Línea de Gobernabilidad y Democracia
El nombre de John Abiud Ramírez Barrientos no tenía hasta hace poco alguna trascendencia dentro del espectro político nacional. Ramírez no pasaba de ser un político regional que había comenzado una carrera en uno de los departamentos con mayor cantidad de cuestionados para hacer política como lo es Santander.
Su figura nació en las entrañas del municipio de Girón, una localidad que ha experimentado un impacto significativo debido a la influencia de mafias y clanes políticos que han mantenido un control prolongado sobre la política regional.
Girón fue el fortín político del cuestionado Luis Alberto Quintero, mejor conocido en las huestes santandereanas como “El Loco”, quien fue alcalde del municipio en cinco ocasiones diferentes. Sus administraciones estuvieron asociadas a reportes recurrentes sobre presuntas irregularidades en procesos de contratación llevados a cabo desde la administración municipal. Además, Quintero fue mencionado por Ernesto Báez en relación con posibles beneficios derivados de su vínculo con el Bloque Central Bolívar de las Autodefensas.
Y aunque parecía que Quintero mandaría a perpetuidad, la transición llegó por cuenta de un pupilo suyo, John Abiud Ramírez Barrientos, quien con los años ha pasado a ser popularmente conocido como John “Avión”, que inició su trayectoria política bajo la influencia de Quintero y posteriormente estuvo vinculado al Clan Aguilar. Ramírez Barrientos ocupó el cargo de secretario de Desarrollo durante la administración de Richard Aguilar y recibió apoyo público de este último en su campaña a la alcaldía en 2016.
Ramírez, tras asumir el poder, inició la construcción de una estructura política con la capacidad de influir significativamente en el municipio, con proyecciones que, según diversos análisis, podrían tener capacidad para extenderse al ámbito departamental.
De John Abiud a John “Avión”
Fuente: Publicidad política de Campaña de John Abiud Ramírez.
En la actualidad, han surgido dudas razonables sobre cómo este político regional alcanzó el estatus de líder electoral, con indicios de la construcción de una estructura de poder que algunos describen como un "clan", con vínculos que se extienden hacia esferas del poder nacional.
La transformación de John Abiud Ramírez Barrientos en una figura política influyente se puede explicar por las dinámicas de poder clientelar desarrolladas durante su administración. Entre 2016 y 2019, cuando se desempeñó como alcalde de Girón, Ramírez Barrientos consolidó su posición mediante la formación de redes políticas basadas en prácticas asociadas al clientelismo tradicional.
Durante su administración, se implementó una distribución de cargos y recursos acorde con las prácticas tradicionales de reparto burocrático. Según un informe de La Silla Vacía, los beneficiarios principales incluyeron a Luis Alberto Quintero, Mario Camacho (exgobernador de Santander, condenado por peculado y celebración indebida de contratos), Bernabé Celis (excongresista) y los senadores Jaime Durán y Miguel Ángel Pinto.
Además, Ramírez Barrientos gestionó el presupuesto municipal creando 7 nuevas secretarías, ampliando la estructura administrativa con la creación de 12 despachos adicionales, lo que resultó en más de 80 nuevos cargos de libre nombramiento y más de 200 contratistas adicionales. Durante su mandato, el presupuesto de la alcaldía experimentó un aumento del 222% entre 2016 y 2017, según un análisis previo realizado desde la Fundación Paz & Reconciliación (Pares).
La administración de Ramírez Barrientos se caracterizó por dinámicas asociadas al clientelismo, incluyendo presunta asignación de puestos, posibles irregularidades en la contratación de obras con presupuestos elevados y otras prácticas relacionadas con la gestión de recursos públicos. Estas acciones permitieron la consolidación de redes políticas y la acumulación de un capital económico cuya magnitud ha sido señalada como significativa por diversos sectores en el departamento.
El origen de un grupo político que apunta a ser un clan
Fuente: W Radio.
El capital económico y político acumulado por John Abiud Ramírez fortaleció su influencia en el ámbito político local, permitiéndole consolidar su control en Girón. Tras la salida de Luis Alberto Quintero “El Loco” del panorama político, Ramírez Barrientos respaldó a Carlos Román, un aliado estratégico desde el Concejo Municipal, como candidato para sucederlo en la alcaldía.
Román ganó las elecciones regionales, consolidando el alcance político de Ramírez Barrientos. Sin embargo, en enero de 2021, una demanda por doble militancia llevó a su destitución, lo que generó la necesidad de convocar nuevas elecciones. En este contexto, Ramírez Barrientos promovió la candidatura de su exesposa, Yulia Moraima Rodríguez, quien resultó elegida como alcaldesa, demostrando una vez más el poderío absoluto del nuevo “cacique”.
El municipio enfrentó una serie de disputas legales, fallos judiciales y cambios en la titularidad de la alcaldía, que alternaron el cargo entre Carlos Román y Yulia Moraima Rodríguez. Al final del periodo, Carlos Román se distanció de Ramírez Barrientos, buscando consolidar su posición política de manera independiente y disputando la influencia del liderazgo previamente establecido.
Lo que pasa es que en esos años John Abiud adquirió un poder desmedido, cuando por medio del Partido de la U se hizo elegir director administrativo de la Cámara de Representantes en 2020, cargo en el cual se ha reelegido hasta el día de hoy. Este avance en la esfera nacional ha fortalecido su posición frente a otros actores políticos regionales, incluidos Carlos Román y diversos líderes santandereanos, quienes han temido el surgimiento de un nuevo grupo político en el departamento.
En 2023, Ramírez Barrientos reforzó su control político en Girón respaldando la candidatura de su hermano, Campo Elías Ramírez, para la alcaldía, buscando evitar escenarios de deslealtad política. Aunque el Tribunal Administrativo de Santander declaró la nulidad de la elección de Campo Elías Ramírez, el control político de John Abiud en el municipio sigue siendo predominante. En caso de que su hermano no pueda retomar el cargo, se prevé que el próximo mandatario municipal sea designado por su influencia directa.
En el mismo año, Ramírez Barrientos extendió su influencia a otros municipios del departamento, apoyando la elección de Elkin Reyes como alcalde de Oiba y de Edisson Cortés como alcalde de Guapotá, lo que termina marcando un esfuerzo por ampliar su alcance político más allá de Girón, consolidando su presencia en el ámbito departamental.
Cuestionamientos sin condena
Fuente: El Espectador.
John Abiud manda en la Cámara y gobierna en cuerpo ajeno, pese a que sobre su espalda pesan más de 7 investigaciones disciplinarias y diversos cuestionamientos que hasta el momento no han tenido condena alguna.
Solo por recordar algunos casos, se encuentra la controversia en torno a la fiesta de 15 años de su hija, cuyo costo se reportó en más de 400 millones de pesos. Además, se le cuestionó por la aprobación del estatuto tributario de Girón durante su periodo como alcalde.
Asimismo, fue señalado por Noticias Uno en relación con la construcción de una clínica en el municipio, un "elefante blanco" que comenzó en 2017 pero permanece inconcluso hasta la fecha, a pesar de haberse invertido $19 mil millones de pesos en su construcción. Además de estos casos, la Contraloría Municipal identificó hallazgos fiscales, así como denuncias e investigaciones relacionadas con la sobretasa bomberil del municipio, entre otros temas, que conforman el legado de Ramírez Barrientos en Girón.
En su gestión como director administrativo de la Cámara de Representantes, John Abiud Ramírez ha sido identificado por diversas acciones políticas. Durante su primer periodo (2020-2022), fue respaldado por el Partido de la U, lo que le permitió entregar presuntamente un contrato a la Empresa de Recursos Tecnológicos, vinculada a Ubeimar Delgado y Dilian Francisca Toro, por más de $50 mil millones de pesos. El contrato tenía como objetivo “implementar una solución tecnológica integral que contenga herramientas modernas e innovadoras de hardware, software y servicios conexos en la Cámara de Representantes”.
Y a pesar de continuar siendo apoyado por el Partido de la U, Ramírez Barrientos ha establecido vínculos con diversos sectores políticos, incluido el actual gobierno. Esta situación ha dado lugar a otros cuestionamientos, como el relacionado con las remodelaciones de las oficinas de los representantes, en las que se instalaron cámaras y micrófonos dentro de los espacios de trabajo de cada congresista. Este hecho fue denunciado públicamente por varios senadores y representantes, y se alegó que la instalación de estos dispositivos fue ordenada desde la Dirección Administrativa de la Cámara.
Pero el escándalo definitivo vino con su vinculación formal al caso de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). En el cual se le ha vinculado por el lado de Sneyder Pinilla y por el lado de Andrés Calle.
En el caso de su relación con Pinilla, la Fiscalía ha señalado a Ramírez Barrientos de colaborar con él para gestionar recursos destinados a Santander, específicamente a los municipios donde el exalcalde tiene influencia. Estos recursos estaban destinados a la gestión de desastres; sin embargo, se ha reportado que hubo "fugas" dentro del monto total asignado. Según W Radio, se menciona que el monto podría superar los 500 mil millones de pesos, de los cuales casi 300 mil millones se destinaron a Girón.
En segundo lugar, John Abiud Ramírez ha sido vinculado al caso por su relación con Andrés Calle, según informa El Espectador. Durante la presidencia de Calle, presuntamente se adjudicaron y direccionaron contratos hacia personas cercanas a diferentes círculos políticos implicados en el escándalo de la UNGRD, así como a varios miembros del círculo de Ramírez Barrientos.
A pesar de estas implicaciones, el 20 de julio de este año fue reelegido para un tercer periodo en la Dirección Administrativa, como si los escándalos no le hicieran mella, como si él no estuviera relacionado o mejor, como si a nadie le importara en manos de quién están los recursos.
Actualmente, Ramírez Barrientos continúa consolidando su poder y expandiendo sus redes en el departamento de Santander, desde donde se anticipa que iniciará una nueva campaña electoral, ya que se acerca 2026.