Por: Redacción Pares
Foto tomada de : La Nación
Claudia Sheinbaum logró a los 62 años un hito: ser la primera mujer presidenta de México, un país que precisamente no se ha caracterizado por su feminismo. Este 1 de octubre se posesionará en el cargo reemplazando a uno de sus mentores, Andrés Mauricio López Obrador. Decenas de mandatarios de todo el mundo viajarán a la capital mexicana para asistir en la posesión que se llevará a cabo en el Palacio Legislativo de San Lázaro. Ayer 30 de septiembre uno de los que llegó fue Gustavo Petro. Lo hizo generando polémica en redes sociales. Petro iba a llegar un día antes pero pospusó por unas horas su viaje después que se presentara el accidente aéreo en el Vichada que dejó nueve militares muertos luego de que un helicóptero del ejército cayera. Uno de los temas que el presidente tocará en la agenda será Venezuela. El canciller Jorge Rojas tocará este tema y lo más probable es que sea inminente una reunión entre los dos mantarios con Maduro. Petro ya se reunió con Sheinbaum y se espera que mientras no se muestren las actas electorales será imposible reconocer a Maduro como presidente de Venezuela.
La llegada de Petro se da en medio de la caída del embajador colombiano en México. Para el presidente fue un golpe durísimo, por eso dijo que lo habían destituido porque él no pertenecía a las élites sino a las clases populares. La verdad es que Moisés Ninco Daza fue retirado por el Consejo de Estado porque no cumplía los requisitos que se necesitan para estar en ese cargo. La ponencia del magistrado de la Sección Quinta, Omar Barreto, comprobó que Ninco Daza no cumplía con los requisitos para ser embajador: no cuenta ni con título, ni con maestría, o los meses de experiencia que exige la ley.
Petro llegó a México mostrándose muy complacido porque, según él, serán ahora dos los miembros del M-19 que manden en Latinoamérica. Así fue la controvertial frase de nuestro presidente: “Mañana (martes 1 de octubre) se reemplaza el Gobierno por la gobernante que quiso el pueblo. Claudia es, fue, miembro del M-19. Es decir, para quienes no quieren dos tazas, ahora el M-19 ha dado dos presidentes en América Latina”. En los años ochenta, ante la terrible persecusión que sufrían miembros de esta guerrilla, debieron refugiarse en México en donde encontraron apoyo por gente que sentía algún tipo de simpatía por este grupo. Durante la presidencia de Turbay Ayala personalidades como Gabriel García Márquez tuvieron que irse a ese país porque sentían detrás de ellos el ruido de las botas militares. En un discurso Petro recordó esto: “Pero sí, (El M-19) tuvo un presidente. Y ahora tiene dos. Porque Claudia fue colaboradora y militante del M-19 en México. En su juventud primera, porque fue hace tiempo, muchos colombianos vinieron a parar a México, porque siempre dio abrigo y cobija a los perseguidos. Aquí vivió García Márquez, su casa está aquí. Y muchos dirigentes del M-19 se establecieron aquí, perseguidos”
Vale la pena aclarar que la nueva presidenta mexicana no ha aclarado su supuesta vinculación con este grupo. Por ahora es sólo una versión por parte de Petro.
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