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La sordera de Duque con los defensores de derechos humanos

Por: Daniela Quintero. Redacción Pares


Anualmente y desde 1948 cuando se proclamó la Declaración Universal de los Derechos Humanos, todos los 10 de diciembre se conmemora el día de los Derechos Humanos a nivel global. Por eso, el gobierno de Iván Duque y las organizaciones de derechos humanos empezaron este año a trabajar a nivel nacional en un protocolo ante el asesinato sistemático de líderes y lideresas sociales, sin embargo, no llegaron a consensos y al final el ejecutivo no escuchó las demandas sociales.


Y llegó el día. En el marco de esta celebración las organizaciones de la sociedad civil y otras entidades no gubernamentales, tales como USAID, la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría General de la Nación y foros SEMANA, prepararon en la ciudad de Cartagena el evento Lidera la Vida para dialogar sobre la situación en la que se encuentran los defensores y defensoras de Derechos Humanos en el territorio nacional. “Los #DDHH tienen que salir de Bogotá, de las bibliotecas, tienen que estar en los territorios con los #LíderesSociales”, expresó el defensor del Pueblo, Carlos Negret, en medio foro Defender a los Defensores.


Por su parte, el representante en Colombia de la Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Alberto Brunoni, expresó que en lo corrido del año 2019, unos 86 líderes y lideresas sociales han sido asesinadas.


Al mismo tiempo en el que se desarrolla el evento de las organizaciones, el gobierno decidió realizar el lanzamiento del Marco de Política Pública de Protección integral y garantías para líderes sociales, comunales, periodistas, y defensores de Derechos Humanos y el cual, se suponía, que iba a ser construido entre ambas partes y al final el ejecutivo lo presentó sin la presencia de quienes más han sido afectados en su labor como defensores y defensoras.


Y es que la seguridad para los líderes y lideresas en Colombia no es una garantía. De acuerdo con el Sistema de Información-SIPARES de la Fundación Paz & Reconciliación-PARES, desde la firma del Acuerdo de Paz en noviembre de 2016 hasta la fecha, han sido asesinado 311 líderes y lideresas sociales en todo el país.


Ante el panorama de riesgo en la labor que desempeñan los defensores de la vida, se dispuso de unos talleres para construir un diagnóstico y una ruta entre el gobierno de Duque y las organizaciones de derechos humanos que defienden los territorios, sin embargo, los segundos se retiraron porque sus peticiones no fueron tenidas en cuenta.


¿Por qué se rompió el diálogo?


La Fundación Pares habló con una fuente en territorio quien aseguró que la iniciativa de esta política pública inició con problemas desde el momento en el que se convocaron a las organizaciones. A todas las personas que estaban construyendo la política les dieron el ultimátum de que debía estar lista para el 10 de diciembre y eso incomodó a la mesa, debido a que, parecía una medida hecha a las carreras.


A pesar de las inconformidades, las plataformas de DD.HH continuaron en la construcción de dicho protocolo y se propusieron diez (10) talleres subregionales, de los cuales se realizaron seis (6), pero funcionaron bien sólo tres (3) , y hubo quejas ante la falta de organización.


“Las organizaciones tuvieron que avanzar apresuradamente en el diagnóstico de la situación de Derechos Humanos porque el gobierno no relacionaba todos los elementos de riesgo con la paz, y todas las consecuencias que les ha traído defenderla”, aseguró la fuente en terreno.


Asimismo, expresó que el gobierno tampoco reconoció algunas de las tareas que han sido perjudiciales para los líderes y lideresas como defender el medio ambiente. Y, por consiguiente, aplazaron los encuentros, y antes del paro se retiraron de esta construcción de política pública.

En ese sentido, dicho Marco de Política Pública que fue presentado este martes, empezó a ser deslegitimado con anterioridad, pues los beneficiarios directos ni siquiera estaban participando en esta propuesta.


Por ello la comunidad internacional también empezó a pronunciarse para que ambas partes pudieran llegar a acuerdos, y recomendaron que de ser necesario era mejor ampliar el tiempo del diagnóstico y de diálogo.


Sin embargo, el gobierno decidió hacer el evento al mismo tiempo que el de Lidera la Vida, y en definitiva no escuchó las razones por las cuales los líderes y lideresas aseguran ser estigmatizados y amenazados.


“Es decir que al gobierno no le importó que tuviera la deslegitimidad entre las personas que iban a ser beneficiarias de esta política pública. Ahora va a presentarla con una construcción bastante precaria y sin consenso alguno entre las plataformas de Derechos Humanos”, concluyó.


Por su parte, la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez anunció la presentación del Marco de política pública de protección integral, en el mismo recinto en el que conmemoró la labor de los líderes sociales y lideresas.


Acto seguido aseguró que dicho Marco se formuló en 114 mesas de trabajo con defensores de DD.HH., 160 servidores públicos nacionales y territoriales, sociedad civil, comunidad internacional, entidades territoriales, sector privado e instituciones del Estado.


Así las cosas, hay una gran parte de las organizaciones que no están de acuerdo con lo presentado por el gobierno de Duque este martes, tampoco se sienten representados, y a su vez lo recibieron como una bofetada a las demandas que plantearon durante meses y que no fueron escuchadas, tales como el desconocimiento de las causas por las cuales han sido amenazados y asesinados los defensores y defensoras de la naturaleza y la vida.

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