Por: Redacción Pares
La semana pasada el país se indignó al saber que el ex senador de Sucre, Álvaro García, saldría libre. Había sido condenado por haber permitido y ordenado la masacre de Macayepo, ´sur de Bolívar, en el año 2000. Esta fue una de las masacres perpetradas en unos cuantos meses por el comandante paramilitar “Cadena”, un rio de sangre que se desató a comienzos de febrero de ese año cuando sesenta y nueve personas fueron asesinadas a punta de garrotes y piedras en el corregimiento de el Salado en los Montes de María. García dio órdenes para remover a los miembros de la Fuerza Pública que le hacían oposición a las AUC en esa zona. A cambio de esto el senador recibiría apoyo de los paramilitares en las zonas donde ejercieran influencia obligando a la gente a votar por él. Fue uno de los casos más aberrantes de parapolítica que ha sucedido en el país.
En la masacre de Macayepo murieron 15 campesinos. El pasado 8 de julio el Juzgado 22 de Ejecución de Penas le otorgó su libertad al argumentarse que había cumplido tres quintas partes de la condena.
García hace parte de un clan familiar que se quedaba con buena parte de la contratación del departamento. Fue condenado a 42 años de cárcel pero un juez había determinado la semana pasada que cumpliría apenas la mitad de su condena.
Es que García accedió por unas horas al beneficio de la libertad condicional pero en las horas de la noche de este martes 16 de julio se cayeron sus intenciones. La Corte Suprema le bajó el pulgar. La Sala de Primera Instancia alertó que el parapolítico tiene un caso muy grave en curso: el del desplazamiento de 4.000 campesinos en sucre a comienzos del siglo XXI. Por este delito García se había acogido a la JEP pero el Tribunal Especial lo había sacado allí porque sus aportes a la verdad fueron nulos. Poco antes de que se diera a conocer la decisión de que García continuaría pagando su pena en La Picota, el presidente de la República Gustavo Petro, quien fustigó cuando fue senador a García y toda la parapolítica de su departamento, aseguró en una intervención desde la Plaza de Bolívar lo siguiente: “Toda la clase política de Sucre estaba arrodillada al paramilitarismo y en esas masacres creció una resistencia popular, pero su senador que asesinaba opositores, fiscales y campesinos por mantenerse en el poder y controlar el voto asesinando”. Apenas supo de la decisión de la Corte habló de un deseo personal que tiene contra el propio “Gordo” García: “Me gustaría que saliera y pudiera jugar con sus nietos, pero hoy la justicia le dice que no puedes salir porque fuiste un masacrador de tu pueblo”.
Se desconoce si la defensa del ex senador ripostará esta decisión.