Por: Redacción Pares

Desde que Rusia empezó la invasión a Ucrania su presidente, Volodymyr Zelensky, ha convertido su vestimenta en todo un manifiesto. Como el famoso saco de Evo Morales, con la que dio la gira Europa del 2006, Zelensky abandonó los trajes, las corbatas por una sudadera negra, estilo militar. Zelensky es desde hace tres años el presidente más conocido del mundo. Había que estar en un bunker enterrado en un McDonalds para no saberlo, pero, al parecer, el presidente de Estados Unidos vive en un lugar así.
Ya todos saben que desde el viernes en la tarde la noticia más viral en redes ha sido el cruce de palabras que tuvieron el presidente norteamericano y el ucraniano. Trump estaba obligando a Zelensky a aceptar un trato leonino: si quería seguir recibiendo la ayuda norteamericana para resitir a Rusia, 350 mil millones de dólares, tenía que entregar casi que la mitad de los boyantes recursos naturales de Ucrania al control norteamericano.
A comienzos de la semana pasada empezó el cruce de mensajes. Trump llegó a llamar a Zelensky dictador mientras soterradamente defendía las alas imperialistas de Putin. Pero la llegada del presidente ucraniano a Washington parecía ser el final de las hostilidades. Sin embargo la reunión empezó con el pie izquierdo. Desde el saludo empezó la tensión. Trump, de traje azul y corbata roja, su uniforme desde que era el anfitrión en el realiti El Aprendiz. “Hoy estás muy bien vestido” le dijo, irónico, el norteamericano.
Durante una hora se encerraron el salón oval. En la reunión se esperaba que se llegara a un acuerdo sobre minerales, Trump habló de los ingresos que generaría este acuerdo. Al empezar la conversación se veían los diferentes puntos de opinión, Trump sacó en cara que EEUU ha dado más plata a Ucrania de lo que ha dado Europa. Pero poco a poco el ambiente se fue poniendo tenso. Incluso un periodista le preguntó a Zelensky por qué no tenía traje. Al ucraniano no le gustó la pregunta. Se formó una especie de rueda de prensa en donde los periodistas empezaron a hacer preguntas. Una de esas preguntas tuvo que ver con la posición de EEUU con Rusia en esta administración, comparada con la de Biden, que tenía una posición más clara de atacar a Putin y defender a Zelensky. Es allí donde el vicepresidente Vance interviene y empieza el incendio. Vance habla de que esta administración está usando la diplomacia para acabar la guerra y eso molestó al presidente ucraniano. “Usted debería estar agradecido con la gente de este país, ustedes no tienen gente, están perdiendo la guerra”. Zelensky se defendió diciendo que “ustedes también van a sentir lo que va a pasar en esta guerra”. Y ahí Trump, quien hasta ese momento permanecía como un buda sentado y silencioso le respondió “Usted no sabe eso, no nos diga a nosotros como nos vamos a sentir, usted no está en la posición de dictar como nos vamos a sentir, nos vamos a sentir muy bien, somos muy fuertes”.
Ese viernes se firmaría un acuerdo, había un almuerzo y una rueda de prensa explicando como EEUU firmaría un acuerdo para reconstruir Ucrania a cambio de la exploración de minerales. Es que, para Trump, Estados Unidos no ha recibido nada a cambio de defender Ucrania.
Pero el disparador de la discusión fue el traje de Zelensky quien lo usará “hasta que termine la guerra”. Es una manera de apoyar a sus tropas quien se mantienen resistiendo a Rusia desde febrero el 2022.